domingo, 10 de octubre de 2010

EBOY, el Pixel Art dibuja ciudades

Estuve dándole vueltas a si la brusca inclusión de los pixelartistas EBOY tras el delicado y clásico dibujo de Shaun Tan pudiera resultar chocante y hasta incómodo para algunos de los lectores del blog. Al final decidí que este es precísamente el espíritu del blog; acoger todo tipo de representación gráfica de la ciudad, por sorprendente que parezca, sea cual sea su técnica y sus modos de hacer, siempre que manifiesten ambición en su realización y despierten interés y sorpresa. Así que aquí están los EBOY, prodigiosos artistas del píxel desde hace tiempo. 



Aunque no pertenece a la serie de ciudades, este artículo la abro gráficamente con este magnifico póster realizado por EBOY para la campaña La Pobreza es moderna de Amnistía Internacional




Un píxel es la menor unidad homogénea en color que conforma una imagen digital, por ejemplo las que manejamos en Internet, como las de este blog. Si ampliamos suficientemente una imagen digital en la pantalla del ordenador, se observan claramente los píxeles que componen la imagen. Estos aparecen como cuadrados en color, en blanco o en negro, o en matices de gris, con lo que las imágenes se forman como un enorme mosaico rectangular de píxeles, donde cada píxel forma un área muy pequeña respecto a la imagen total. Cada píxel se puede pintar uniformemente con cada uno de los hasta 16.777.216 colores que admite el software actual, según la calidad de la imagen que se pretenda. 

Conforme ampliamos la imagen digital, van destacándose los píxeles, produciendo ese aspecto pixelado característico que le dan las líneas quebradas.
 
El “pixelado” de la imagen digital muy ampliada, es el utilizado por los creadores informáticos para programas sencillos, por ejemplo el primer y entrañable juego del Príncipe de Persia. Y también es con el que dibujan “pixoramas” isométricos de ciudades, entre otras muchas cosas, el colectivo EBOY, formado en 1998 por los alemanes Steffen Sauerteig, Svend Smital y Kai Vermehr, actuales líderes del llamado pixel art. Resultan escenarios urbanos llenos de color y vida, y que de forma muy particular recrean fantásticamente la ciudad, cualquiera que ella sea. A día de hoy, el colectivo EBOY es un icono mediático internacional, al que las más importantes empresas y sociedades acuden para sus proyectos de comunicación. Las imágenes que muestro a continuación está recogidas en un libro; eboyPixorama.

 En una exposición del grupo EBOY en enero de 2009, en la galería Rojo de Barcelona, se decía; “Pixorama es la culminación de un trabajo modular y orientado a un objeto de estilo que introduce la reutilización y remodelación de sus partes atómicas”. Casi nada, aunque a mí me parece sencillamente la versión digital de los delicados y carísimos mosaicos romanos y bizantinos, -o como el que aquí muestro del exquisito Pietro Cavallini, de 1291, en Santa María de Trastevere-, donde las diminutas teselas cortadas y conformadas a mano, son sustituidas por los píxeles. En definitiva, nada nuevo, pero al alcance de todos y sin coste alguno.


Berlin 





Colonia






Los Ángeles





 
 Nueva York





Oslo





Londres






Marsella





Singapur





Tokio





Venecia


Desde el principio EBOY quiso trabajar en formato digital, producir su trabajo en la pantalla del ordenador y que su público lo viera en su propia pantalla doméstica,. No querían imprimir sus trabajos. Querían un aspecto nítido en pantalla, así que el paso lógico a seguir era la utilización de pixeles y la pantalla, su lienzo.

Su sistema de trabajo, más aún que su técnica de dibujo, que se limita a la exclusiva utilización de la herramienta “lápiz” de Photoshop para dibujar, representa el modo de hacer globalizado de la era digital. Dado que viven en ciudades y continentes distintos, se reúnen por videoconferencia “para discutir los mails de proyectos y las peticiones” que tienen, pues los tres trabajan en estudios diferentes.

“Básicamente uno de nosotros es el director de la orquesta, quien va a dirigir la imagen final, este miembro cambia constantemente dependiendo del proyecto, así es que no hay alguno definido, él se encarga de recolectar todo y componer el trabajo final, también se encarga de sincronizar a los demás”. 


“Utilizamos partes para poder simplificar nuestro proceso de trabajo. Además, estas partes las guardamos como librerías y así podemos modificarlas y reutilizarlas en futuros proyectos. Por ello nuestra librería crece con cada trabajo que realizamos, con lo que nuestra colección es muy completa”. No utilizan bocetos precios. Uno de sus enormes pósters, bien organizados, les puede llevar dos meses de trabajo. Desorganizados, pueden tardar años.  

A continuación os dejo una serie de enlaces para ampliar datos sobre este colectivo:






 

1 comentario: