En vista de que mis comitentes habituales -ayuntamientos, diputaciones y organismos paraestatales en su mayoría, están más secos que la Rambla del Moro, y parece que lo van a estar mucho más todavía-, y que una salida personal a la falta de encargos podría ser contactar directamente con el consumidor, me he liado esta vez con un dibujo grande, de 100 x 70 cm, a lápiz y carboncillo y quizás unas aguadas como me sugiere mi hermano Luis, sobre un paisaje urbano de mi ciudad natal, Cartagena, concretamente de la calle Sagasta. No es un espacio especialmente significativo, pero es una calle por la que casi siempre paso cuando estoy en Cartagena. Es uno de los paisajes cartageneros más familiares para mí y que, independientemente de su valor ambiental, tiene ese carácter confortable de lo conocido.
Este es el aspecto del dibujo a día de hoy, 28 de mayo de 2010. Así va a permanecer un par de semanas pues afortunadamente tengo un par de trabajos que hacer. La parte más próxima al espectador debo oscurecerla y ensuciarla bastante una vez encajada y dibujada con precisión. La farola, al contrastar con los tonos desvaídos del edificio del fondo toma un gran protagonismo -de hecho he suprimido un par de farolas que en la realidad se alinean con esta y las del fondo, precísamente para resaltar ese protagonismo- y, sobre todo, "perfora" y hace presente el espacio a su alrededor
El dibujo hace un par de semanas, más o menos, con el resto de herramientas.
El dibujo hace un par de semanas, más o menos, con el resto de herramientas.
Nunca he dibujado a este tamaño y el paisaje, como he dicho, no es especialmente interesante, así que me lo he planteado como un doble reto; hacer un dibujo aceptable de un motivo a priori sin interés, y hacerlo a buen tamaño, con lo que esto me obliga a la hora de soltar la mano con el carboncillo y el lápiz. Como véis, me cuesta un mundo ensuciar el dibujo, y peleo permanentemente por soltarme, pero tropiezo con una clara deformación profesional, pues no puedo renunciar a construir rigurosamente el espacio de la ciudad. Mi idea es establecer una base muy definida y, en una fase final, a modo de veladura, trabajar con toda la soltura de la que sea capaz para darle ese tono ligero y suelto al tratamiento de la luz. A ver que pasa.
Este detalle muestra cómo doy el lápiz y el carboncillo antes de los matices finales
Mientras tanto iré colgando parte del proceso y herramientas que utilice en el dibujo. El papel es un Basic de la casa Guarro, de 300 gr, el utilizado por los chavales de colegios e institutos. Es robusto, admite muy bien el lápiz, la pluma, el carboncillo y la acuarela, incluso dada en aguadas generosas. Las herramientas son las que véis en la foto, nada de particular.
Sí he utilizado los medios que ofrece el ordenador a la hora de encajar, cuadricular –para trasladar el dibujo ampliado al papel-, y sobretodo tratar la imagen, su encuadre, luces y sombras, para conseguir una especie de boceto previo. Quiero producir un matizado contraste entre la grieta de luz que se cuela entre los edificios del fondo, y la oscuridad de la “caja” edificada más próxima al espectador. Ya veremos.
Este es el resultado final con la advertencia de que la foto no es exactamente fiel al dibujo original. A la derecha surgió la luz de la tienda casi sin darme cuenta, y la aproveché dándole más relevancia. A su lado, y como contraste, coloqué un negro absoluto con carboncillo prensado. De esta manera los dos extremos, blanco y negro, establecían los topes de la escala de grises. Así, cualquier duda sobre la matización de la luz, queda despejada. Me refiero a que el espectador ya sabe que las intensidades de uno u otro elemento son las que el autor ha querido, independientemente de que haya acertado o no. A ver qué os parece.
Voy a escanear el dibujo uno de estos días: cuando lo haya hecho sustituiré esta foto hecha por mí, por el escaneado. Será mucho más fiel al original
Unos trabajos impresionantes!
ResponderEliminarHa sido un gusto enorme descubrirlos.
saludos.
Hola RAV; aunque por motivos diferentes yo también tuve que espabilar hace unos años al cerrarse el estudio de arquitectura con el que colaboré duranta treinta años. Me puse las pilas, como tú con tu hija, y el resultado fue que los mejores y más ambiciosos trabajos empezaron a salir desde entonces. Lo cierto es que la seguridad económica y la rutina en el trabajo te aburguesa sin remisión. Nos va a ir mejor a los dos a partir de ahora. Seguro. Un saludo
ResponderEliminarque lindo trabajo... tenes un don impresionante!! para dibujar yo estoy estudiando arquitectura y ojala pueda ser un grande como vos... saludos
ResponderEliminarWOW espectaculares esos dibujos
ResponderEliminarNunca e dibujado edificios, pensaba que yo dibujaba medianamente bien, pero después de ver esto se que todavía me queda muchísimo que aprender.
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